China es mucho más que las Olimpiadas 2008, que una serie de cifras de impresión (más de 1.300 millones de habitantes, el cuarto país más extenso del orbe…), que el invasor del Tibet o que la paradógica combinación comunismo-capitalismo salvaje. China es y ha sido un mundo que ha evolucionado en paralelo a nuestro conocido entorno occidental, con una serie de peculiaridades culturales, étnicas, artísticas y sociales que lo situan casi en otra dimensión. China es, como su propio nombre en chino indica, Zhonghuo, el "centro del mundo" o, al menos, así será durante el mes de agosto de 2008.
 LA POLÍTICA DEL DRAGÓN China ha pasado de la austeridad maoísta al comunismo sin complejos. Aquí te damos las claves para entender cómo el gigante asiático ha vivido el progreso, y cómo los acontecimientos de Tiananmen fueron una lección que ha marcado hasta hoy el rumbo del país. |
 LAS FARAÓNICAS OBRAS DE CHINAHacemos un breve resumen de las inmensas construcciones de la China que salió deshecha de la Revolución Cultural y que se reenganchó a la vida tras la muerte de Mao. Destacamos la gran presa de las Tres Gargantas, las grandes obras de ingeniería para comunicar ciudades como Shanghai y los trenes futuristas que circulan a velocidades de vértigo. Durante las tres últimas décadas el país ha apostado por una única fórmula para ganar el futuro: crecimiento económico a cualquier precio. |
 RELIGIÓN: TOLERANCIA CON MATICES China y las religiones no han tenido un matrimonio fácil. En los años duros del maoísmo fueron perseguidas como amenaza para el Partido Comunista. Pese al ateísmo estatal, hoy día se estima que hay 150 millones de creyentes; dos tercios practicarían una mezcla de budismo, taoísmo y confucianismo. |
 CHINA DESDE LAS ALTURAS Las mejores fotografías a ojo de pájaro. Un pequeño reportaje donde se observa como la huella del hombre parece insignificante ante la inmensidad de montañas, ríos y desiertos. |
 ALTA CONTAMINACIÓN, ECONOMÍA PUJANTEEl imperio chino está al límite. Sus niveles de contaminación tocan techo y amenazan con la escasez de suelo fértil. Nos sumergimos en la ciudad provincial de Wuhai cerca de Pekín donde la misión de toda la ciudad es transformar el carbón en acero. Las altas chimeneas traen devastadoras consecuencias. Los datos: 650.000 chinos mueren “prematuramente” cada año por el aire contaminado, y 60.000 por el agua sucia. La Organización Mundial de la Salud incluso estima en 750.000 el número de las “bajas medioambientales”. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario